La necesidad actual de la revitalización de la iglesia

Uno no necesita mirar muy lejos para encontrar una iglesia que está en crisis. Mientras algunas iglesias parecen estar creciendo, o al men...

Uno no necesita mirar muy lejos para encontrar una iglesia que está en crisis. Mientras algunas iglesias parecen estar creciendo, o al menos estables, otras están muriendo. Las estadísticas de muerte de iglesias varían según el lugar y el país. En los Estados Unidos se ha dicho que hay entre ocho y diez mil iglesias perdiéndose cada año.

Por los últimos veinticinco años he estado trabajando con iglesias para entrenar a líderes. Durante los últimos seis años he estudiado y trabajado en el área de la revitalización de iglesias en países de Centroamérica y Sudamérica. He visto que las situaciones varían, y que los problemas varían, según la denominación y las iglesias individuales.

Tendencia a desviarse

Así que, quiero hacer una observación: las iglesias tienden a desviarse. Como un barco sin ancla, el movimiento puede ser mínimo al principio, pero hay movimiento. El apóstol Pablo estaba consciente de esto también. En Hechos 15.36 Pablo decía a Bernabé que deberían volver y chequear las iglesias que fueron plantadas en el primer viaje misionero. En el versículo 41, el propósito de fortalecer a las iglesias fue claramente establecido. En Hechos 16.5 leemos que las iglesias estaban siendo fortalecidas en la fe y que estaban creciendo en número diariamente.

¿Cuándo fue la última vez que usted observó a una iglesia agregando nuevos creyentes a diario? ¿Es acaso la iglesia de Hechos 2 una anomalía? ¿O fue un evento único e irrepetible? Usted tiene que seguir a Pablo en su plantación de iglesias hasta Tesalónica para encontrar la respuesta. En Tesalónica el evangelio llegó con poder, las personas fueron liberadas de los ídolos, ¡el arrepentimiento se describe junto con un gran entusiasmo de la iglesia por el evangelismo!

Una mirada a la iglesia de Éfeso

Si usted tiene dudas de que las iglesias se desvíen realmente, entonces estudie la iglesia de Éfeso. Apolos inició la obra en Hechos 18.24. Pablo llegó en Hechos 19.1 anunciando el evangelio. Dos años de ministerio allí resultó en que la Palabra de Dios creciera y prevaleciera (19.10, 20).

Más tarde, en Hechos 20.28-30, Pablo advierte a los principales líderes de Éfeso que el peligro vendría desde adentro. Avance rápidamente hasta 1 Timoteo 1.3 para leer que Pablo envió a Timoteo para corregir su desviación hacia un error doctrinal. Pablo ha enviado a su mejor hombre para guiar a la iglesia de regreso a la salud.

¿Qué clase de líder se requiere para guiar a una iglesia de regreso a la salud? Yo diría que uno que está dispuesto a invertir 3 a 5 años en el proceso de la revitalización. No es una reparación rápida. Debe haber perseverancia y voluntad para permanecer de pie ante la crítica.

Nuevamente, avance rápido hasta Apocalipsis 2. Jesús habla a la iglesia de Éfeso a través de Juan en Apocalipsis 2.2-3:

«Yo conozco tus obras, tu fatiga y tu perseverancia, y que no puedes soportar a los malos, y has sometido a prueba a los que se dicen ser apóstoles y no lo son, y los has hallado mentirosos. Tienes perseverancia, y has sufrido por mi nombre y no has desmayado» (LBLA).

Obras, fatiga, perseverancia, discernimiento doctrinal, examinar a los maestros para evitar a los falsos maestros, y resistencia, son todos aspectos positivos que a la mayoría de las iglesias les encantaría oír en su elogio. Muchas iglesias estarían contentas con esta lista. Probablemente la iglesia de Éfeso era bien ortodoxa, organizada, doctrinalmente pura, y muy probablemente ciega a lo que venía en el siguiente versículo. Jesús dice: «Pero tengo esto contra ti: que has dejado tu primer amor» (v. 4).

¿Cómo habrá sido?

Me pregunto cómo habrán lucido sus caras cuando escucharon estas palabras. ¿Cuál habrá sido su reacción? ¿Cómo pueden estos actos ponderables equivaler a nada ante la realidad del único pecado mencionado? ¿Cómo puede una iglesia existir sin amar a Cristo? Si ellos no estaban amando a Cristo, ¿cómo se supone que habrían estado tratándose unos a otros? Considere toda la verdad del Nuevo Testamento acerca del amor, en 1 Corintios 16.22: «Si alguno no ama al Señor, que sea anatema. ¡Maranata!» (LBLA).

¿Cómo habría sido ser miembro de una iglesia sin el amor de Cristo influenciando en todo? ¿Ha considerado que pudieron haber hecho un ídolo de su «sana doctrina»? Yo sospecho que eran legalistas, que habían perdido su celo evangelístico, habían perdido el poder del evangelio que una vez tuvieron, y que se volvieron torpes para escuchar la voz de Dios (He 5.11). En el versículo 7 Jesús dice «Oigan, oigan lo que el Espíritu dice a las iglesias». ¿Habremos perdido también nosotros la capacidad de oír la voz de Dios?

La amenaza de Jesús

Jesús los llamó a recordar de dónde habían caído, a arrepentirse y a hacer las obras que habían hecho al principio, o... su candelabro sería quitado de su lugar, por Él mismo (v. 5). ¡Jesús amenaza con cerrar esta iglesia si ellos no siguen Sus instrucciones!
¿Ha oído usted alguna vez a alguna iglesia muerta decir que «Jesús nos cerró porque no seguimos Sus instrucciones»? Yo nunca lo he oído tampoco. Nosotros culpamos al diablo, al gobierno, a la economía, a la gente, pero nunca reconocemos que Cristo, como cabeza de Su iglesia, pudo haberla cerrado.

La iglesia de Éfeso necesitaba oír del Señor. Necesitaban una voz externa que los despertara, que los agitara. Veo mi rol en facilitar a las iglesias en la renovación o revitalización ayudarlas a descubrir de dónde pudieron haber caído. Quiero ayudarlas a descubrir la agenda de Dios para cada iglesia individual.

Estoy en deuda con el Dr. Harry Reeder, por su libro De las brasas a las llamas; con el Dr. Henry Blackaby, por sus libros Mi experiencia con Dios y Candelabros que se apagan; y con el Dr. Thom Rainer, por su libro Autopsia de una iglesia muerta. He usado algunos de sus pensamientos en este artículo. ¡Lea sus libros para el resto de la historia!

Acerca del autor:
El Dr. Robert Wilson y su esposa Lolly se dedican a la dirección y a la enseñanza en institutos bíblicos en América Central y del Sur con el ministerio Alcance Mundial. A menudo dictan conferencias matrimoniales y
familiares, así como sobre predicación expositiva y cómo estudiar la Biblia inductivamente. Robert trabaja en promover y expandir la revitalización de la iglesia a través del ministerio Embers to a Flame (De las Brasas a las Llamas). También está capacitando a pastores para que entrenen a sus iglesias hacia la espiritualidad y la vitalidad.
wilsonrcjr@gmail.com