--> «Algún día me voy a organizar» | Revista La Fuente

$hide=home

$show=0


«Algún día me voy a organizar»

El pastor Miguel frenó su auto frente al semáforo en camino a buscar a sus hijos del colegio. Se presentó delante de él un joven malabarista que tirab

EL RETO DE BALANCEAR EL MINISTERIO PASTORAL Y LA ADMINISTRACIÓN

Tarea pastoral vs. la responsabilidad administrativa
El pastor Miguel frenó su auto frente al semáforo en camino a buscar a sus hijos del colegio. Se presentó delante de él un joven malabarista que tiraba pelotas mientras sostenía un paraguas sobre su pera. Con una o dos pelotas andaba bien, pero cuando sumó varias más se le caía todo. Con cara de avergonzado, estiró la mano esperando una propina pese a su actuación accidentada. Miguel le dio un billete, mientras pensaba: «Soy igual, cobrando mi salario mientras la estantería de la administración de la iglesia cae de a pedazos».

En su mente se hizo una lista de las cosas que tenía que atender con urgencia: la carta de membresía que tenía que enviar, el orden del día para la próxima reunión del consejo, una solicitud a la municipalidad y a la policía para poder realizar una obra evangelística en la plaza, una llamada a la hermana que necesitaba saber dónde comprar papel higiénico para el templo, y… sabía que algo se le escapaba. Mientras tanto, el auto atrás tocó la bocina para sacarle de sus delirios.

La tensión entre la tarea pastoral y las responsabilidades administrativas es una constante para los que estamos en el ministerio. ¿Cómo logramos no ser vencidos por la avalancha de detalles que no parecen acompañar nuestro llamado? ¿Cómo avanzamos cuando parece que no hay otro para atender esas cuestiones? ¿Cómo logramos un equilibrio en el uso del tiempo? Las respuestas son muy personales; sin embargo, podemos señalar un camino equilibrante.

Abrumado por la administración

No cabe duda de que el pastorado es un trabajo complicado. La variedad y abundancia de cuestiones a atender, los quehaceres que se suman al último momento, y la expectativa de saber solucionar todo (aunque no hubo clase ninguna en el seminario para prepararnos para eso) lleva a menudo al agotamiento. Y se pierde el deleite de la predicación de la Palabra, el gusto de cuidar espiritualmente a los feligreses, y el gozo de servir al Señor. En algunos casos, se puede perder también a la familia, el matrimonio, o la salud.

Es, entonces, vital volver a lo principal: ¿A qué te ha llamado Dios? Tal vez, puedes recordar un versículo bíblico que el Señor utilizó para indicar el rumbo de tu vida. Sin duda, es necesario reafirmar los dones espirituales que indican cuál debe ser el enfoque principal de tu ministerio. Dick Hillis, estadista misionero del Siglo XX decía: «No hagas nunca lo que otro puede hacer si tú puedes hacer algo que ningún otro puede». Este «imperativo ético» nos hace enfocar en lo más importante: nuestro aporte único a la obra de Dios.

De igual manera, tenemos que lidiar con lo urgente que pide a gritos nuestra atención. A menudo lo urgente es enemigo de lo importante. Entonces hay que echar mano a una variedad de estrategias, tales como la priorización, la planificación, y la delegación. Pero hay otro más.

Hace unos años entré en un negocio y al lado de la caja estaban en venta unos bolígrafos con una característica poco usual. Al apretar un botón, decían «No» de diez maneras diferentes. ¡Compré uno de inmediato! Si no podía yo decir «no» al grito de lo urgente, mi bolígrafo me daba opciones.

Sin embargo, hay tareas en que no hay otro candidato para realizarlas. En tal caso, tenemos que hacerlas, pero a la vez planificar para que las haga otro en el futuro. Puede requerir discipulado, entrenamiento, y reordenamiento de la gestión, pero es necesario.

Ordenando los conceptos

Un paso importante hacia una solución definitiva es ordenar los conceptos sobre lo administrativo. Lamentablemente, la administración a menudo se ve como un mal necesario, algo poco espiritual. Sin embargo, es una obra espiritual. Recordemos que administrar es un don espiritual (Rom. 12:8; 1 Cor. 12:28). Pedro nos amonesta:
Según cada uno ha recibido un don especial, úselo sirviéndoos los unos a los otros como buenos administradores de la multiforme gracia de Dios. (1 Pe. 4:10 LBLA)
John Piper enfrenta un desequilibrio hacia el profesionalismo y exhorta a priorizar el estudio y predicación de la Palabra y el cuidado espiritual de las almas.¹ Tiene razón en que el pastor no es primeramente el CEO de la empresa eclesial, sino más bien un siervo de Dios que debe imitar a Cristo y los apóstoles en su ministerio.

No obstante, en nuestro ambiente el poco profesionalismo en el área administrativa milita en contra del crecimiento de la iglesia. Nuestra ignorancia en cuanto a la gestión administrativa hace que el péndulo vaya al otro extremo, o sea, hacia el caos y el desorden. Y Dios ama el orden (1 Cor. 14:40). Por ende, hay mucho que se puede aprender de los libros y artículos, sean seculares o cristianos, sobre el liderazgo y la administración. Es sabio aprender de los que saben.

A veces hay conflictos entre las expectativas de la iglesia y las del pastor. A veces se escucha: «Pero el pastor anterior lo hacía». En otros momentos, cuando las expectativas no son expresadas, los hermanos simplemente desaparecen porque el pastor no hizo lo que se esperaba. Ante esta situación es necesario conversar con los líderes y también con la congregación explicitando las expectativas, no sólo en lo pastoral, sino también en lo administrativo. La confección de una descripción de trabajo debe ser negociada y periódicamente revisada. Bien puede ser que se requiera enseñanza bíblica sobre el rol y las tareas del pastor.

Efesios 4:11-12 nos señala:
Y Él dio a algunos el ser… pastores y maestros, a fin de capacitar a los santos para la obra del ministerio, para la edificación del cuerpo de Cristo…» (LBLA).
Este pasaje claramente indica que son los creyentes que hacen el ministerio, no el pastor. Y su tarea es capacitarlos para que lo hagan con eficacia.

Vislumbrando una salida

¿Qué podríamos recomendar al pastor Miguel? Sin duda, requiere un análisis personal, realizado con oración y compasión. Pero a grandes rasgos, se puede señalar un rumbo, un comienzo hacia la luz al final del túnel.

Primero, debe reconocer su llamado y sus dones. Tomando una hoja de papel, podría escribirlo con letras mayúsculas. Eso debe ser su prioridad —cumplir con lo que Dios quiere—. Debe ser lo que ocupa más de su tiempo. Sin embargo, el pastor debe reconocer también sus limitaciones. Bien puede ser que la administración no sea «lo suyo». En tal caso, debe recurrir a su teología: el concepto del Cuerpo de Cristo. Será necesario identificar a los que tienen dones que completan y complementan los suyos. Un pastor a quien le cuesta la matemática debe buscar a un hermano o hermana quien tenga capacidad de contador. Otro, a quien le falta expresarse en papel, debe encontrar un asistente o secretaria que pueda plasmar en papel sus ideas con buena ortografía y gramática.

Reconociendo Efesios 4:12, el pastor Miguel también debe estar atento a las áreas en que su iglesia requiere capacitación. No es necesario que él la haga, pero sí que canalice a los hermanos hacia las oportunidades para capacitarse, sea en un seminario o instituto bíblico o en talleres brindados por numerosas entidades evangélicas. Al recibir esta formación puede estar mirando al futuro ministerio de los hermanos, buscando su éxito en el servicio para el Señor.

En medio de todo esto, hay que delegar todo lo que se puede. Y en lo que queda, aunque sea en forma provisoria, planificar con anticipación cómo realizarlo dentro de los límites actuales. Tal vez, en el «malabarismo pastoral», algunas pelotas se van a caer. Algunas pueden ser pasadas a otros. Otras hay que agregarlas de a poco. Mientras tanto, hay que mantener el ojo en lo principal: el llamado de Dios. 

Referencias:
  1. Piper, J. (2010). Hermanos, no somos profesionales. Viladecavalls: Clie.
Por Pablo Wright (pwright@avmi.org)
El Dr. Pablo (Paul) Wright ha sido misionero, pastor y educador en la Argentina por más de 40 años. Actualmente se desempeña como rector del Instituto Bíblico Evangélico Mendoza. Está casado con Elizabeth y juntos tienen 4 hijos y 7 nietos.

$hide=home$type=list$show=post$ct=0$cnt=10$sn=0$rm=0$mt=0$cm=1

Cuando quieras, te brindamos dos opciones para aumentar tu impacto ministerial:
1. Únete a nuestro boletín «Conectados a LA FUENTE» donde más de 200,000 obreros y líderes evangélicos se benefician de los contenidos de la revista LA FUENTE.
2. Suscríbete a nuestra revista: Obtendrás acceso a más de 200 ediciones anteriores, además de todo el contenido nuevo que producimos tanto semanal como mensualmente.
Nombre

12345,8,7 Secciones Ministeriales,6,A-DESTAQUE-COLUMNA,22,acceso,3,Actual,2,Actualidad,160,Administración y Finanzas,33,Agenda Evangelica,5,ALAS,7,ALTO-TRAFICO,2,Aplicación móvil,1,Apoyar,3,Archivo,6,Biblia,12,Blog,630,Bog,1,Bosquejos,49,Col-Inferior,3,Colecciones,7,Colecciones en PDF,7,Comentarios,3,Consejeria,27,Consejería Cristiana,1,Contenidos en portugués,5,Creatividad en la Iglesia,10,Crecimiento de Iglesia,46,Cuidado Pastoral,86,Desarrollo Personal,42,Descargas,35,DESTACADO ARRIBA,10,Destacados,16,Ediciones 2015,11,Ediciones 2016,11,Ediciones 2017,12,Ediciones 2018,12,Ediciones 2019,12,Ediciones 2020,12,Ediciones anteriores,121,Editorial,1,Email semanal,25,Encuestas,20,Enseñanza,54,Entrevistas audio,3,Escuela Dominical,37,Estudios,1,Evangelismo,18,Experiencias,6,Experiencias-de-Lectores,15,falta-arreglar,1,Familia y Educacion,34,Formularios,6,Frases Cristianas,1,Grupos Pequeños,34,Herramientas,1,Historia Cristiana,31,Inspiracion,33,Jovenes y Adolescentes,41,Lecciones,3,Lectores,3,lectores comentan,3,Liderazgo,54,Listas,15,Listas de Lecciones Bíblicas,2,Listas de Peliculas Cristianas,8,Listas de Preguntas Bíblicas,6,Listas de Temas Cristianos,2,Literatura,21,Mas recursos,9,Mentoreo,8,Misiones,23,Música,1,n/n,1,Navidad,5,nosotros,6,Organismos Evangélicos,6,Peli2023,1,Peli2024,7,Peliculas,19,Perfil,13,pie de pagina,1,Portada,327,Portada2,4,Portada3,3,Predicacion,14,Preguntas Biblicas,6,Recursos,16,Recursos Pastorales,27,Recursos presentados,5,Recursos2024,7,Romance y Matrimonio,28,Semana Santa,2,Series,36,Series de Artículos,46,Temas de Portada,56,Testimonios,7,Video Taller,38,
ltr
item
Revista La Fuente: «Algún día me voy a organizar»
«Algún día me voy a organizar»
El pastor Miguel frenó su auto frente al semáforo en camino a buscar a sus hijos del colegio. Se presentó delante de él un joven malabarista que tirab
https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgRZYgPkwd23VN7JkL0psa0ChER8qrZbiMAcHEBCB8RBHD56hczS2vfNCHg6-7aMQGfELX5T0Ro1eS4xdtbID0wsSoXVNlW92C3sZIudG7SEdMjQMXLur-XE0JfyRxLM4QZoJnX8zmmdeksB4qoAVZ1pqgIWxUZwqVnfQCJNmrM-_vqkGSv4So0h3tROye0/s16000/3386.jpg
https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgRZYgPkwd23VN7JkL0psa0ChER8qrZbiMAcHEBCB8RBHD56hczS2vfNCHg6-7aMQGfELX5T0Ro1eS4xdtbID0wsSoXVNlW92C3sZIudG7SEdMjQMXLur-XE0JfyRxLM4QZoJnX8zmmdeksB4qoAVZ1pqgIWxUZwqVnfQCJNmrM-_vqkGSv4So0h3tROye0/s72-c/3386.jpg
Revista La Fuente
https://www.revistalafuente.com/2025/02/tarea-pastoral-vs-la-responsabilidad.html
https://www.revistalafuente.com/
https://www.revistalafuente.com/
https://www.revistalafuente.com/2025/02/tarea-pastoral-vs-la-responsabilidad.html
true
4363038206331579885
UTF-8
Loaded All Posts Not found any posts Leer mas Responder Cancel reply Delete Por Inicio PAGES POSTS Ver todo También te recomendamos estos artículos: Sección ARCHIVE SEARCH ALL POSTS Not found any post match with your request INICIO Sunday Monday Tuesday Wednesday Thursday Friday Saturday Sun Mon Tue Wed Thu Fri Sat January February March April May June July August September October November December Jan Feb Mar Apr May Jun Jul Aug Sep Oct Nov Dec just now hace 1 minuto $$1$$ minutes ago hace 1 hora $$1$$ hours ago Ayer $$1$$ days ago $$1$$ weeks ago more than 5 weeks ago Seguidores Seguir THIS PREMIUM CONTENT IS LOCKED STEP 1: Share to a social network STEP 2: Click the link on your social network Copy All Code Select All Code All codes were copied to your clipboard Can not copy the codes / texts, please press [CTRL]+[C] (or CMD+C with Mac) to copy Table of Content