Los adolescentes dentro de la iglesia son un grupo difícil de alcanzar, y no culpemos al adolescente o a su paso por la pubertad de esto. ...
Los adolescentes dentro de la iglesia son un grupo difícil de alcanzar, y no culpemos al adolescente o a su paso por la pubertad de esto.
Por lo general la escuela dominical para niños es un grupo definido y que funciona en la iglesia. Así también el grupo de jóvenes, ellos se organizan con el apoyo del pastor y tienen sus reuniones semanales.
En nuestras iglesias en Latinoamérica damos mucho valor al trabajo con los niños, porque los padres lo piden y a veces lo impulsan. También damos mucho valor al trabajo con los jóvenes, porque dinamizan y avivan el culto con su energía y con sus ideas.
¿Pero qué ofrecemos entre estos dos grupos? Generalmente nada.
Y es allí donde perdemos a los adolescentes.
El máximo objetivo de un ministerio de adolescentes es guiarle al joven conocer y amar a Jesús, como Señor y Salvador. Porque ÉL es quien conoce esa etapa especial por la que pasa el adolescente; una etapa de cambios, una etapa de emociones intensas y una etapa marcada por la búsqueda de sentido, de propósito y de un grupo a que pertenecer.
Hoy quiero invitarles a comentar acerca de esta temática.
No tienes que responder cada pregunta. Solo donde tengas un aporte que dar a nuestros lectores.
Tu experiencia será de gran provecho para las iglesias que no cuentan con un trabajo de adolescentes o que desean iniciar o desarrollar esta área.
Por lo general la escuela dominical para niños es un grupo definido y que funciona en la iglesia. Así también el grupo de jóvenes, ellos se organizan con el apoyo del pastor y tienen sus reuniones semanales.
En nuestras iglesias en Latinoamérica damos mucho valor al trabajo con los niños, porque los padres lo piden y a veces lo impulsan. También damos mucho valor al trabajo con los jóvenes, porque dinamizan y avivan el culto con su energía y con sus ideas.
Y es allí donde perdemos a los adolescentes.
El máximo objetivo de un ministerio de adolescentes es guiarle al joven conocer y amar a Jesús, como Señor y Salvador. Porque ÉL es quien conoce esa etapa especial por la que pasa el adolescente; una etapa de cambios, una etapa de emociones intensas y una etapa marcada por la búsqueda de sentido, de propósito y de un grupo a que pertenecer.
Hoy quiero invitarles a comentar acerca de esta temática.
- ¿Cómo va el trabajo de los adolescentes en tu iglesia?
- ¿Tienen un programa o un ministerio con los adolescentes?
- ¿Cada cuánto se reúnen?, ¿cuántos adolescentes participan?, ¿qué hacen generalmente?
- Comenta experiencias positivas del trabajo con adolescentes en tu iglesia.
- Desde tu experiencia: ¿Cuales son los frutos de un buen trabajo con adolescentes?
- ¿Qué programa o materiales utilizas con los adolescentes de tu iglesia? Compártelo con un enlace en la sección de comentarios.
No tienes que responder cada pregunta. Solo donde tengas un aporte que dar a nuestros lectores.
Tu experiencia será de gran provecho para las iglesias que no cuentan con un trabajo de adolescentes o que desean iniciar o desarrollar esta área.