Guillermo Serrano, director del Ministerio Reforma, conduce programas de radio y televisión, además escribe un blog y mantiene un videoblo...
Guillermo Serrano, director del Ministerio Reforma, conduce programas de radio y televisión, además escribe un blog y mantiene un videoblog. Trabaja en este ministerio desde hace 23 años. Reside en Miami con su esposa Patricia y tienen 4 hijos. En esta entrevista conoceremos un poco acerca él.
Libros publicados: Las torres gemelas, su destrucción y su mensaje; Cristianismo práctico; La predicación como imagen de la Palabra.
Pasatiempos: lectura, ajedrez, cine y televisión.
Sitio web: www.ministerioreforma.com
¿Cómo y cuándo conoció a Cristo?
Vengo de una familia católica romana. Era una familia bien constituida, pero con 14-15 años, teniendo algunas dudas de la fe, unos amigos me invitaron a una campaña evangelística y eso despertó en mí la curiosidad por la lectura de la Biblia. Por curiosidad también comencé a asistir a la iglesia Presbiteriana, que organizaba la conferencia. Fue un proceso largo, pero la lectura de la Biblia me llevó a una convicción de pecado, a un arrepentimiento y a disfrutar de una salvación, que siempre es don de Dios, que nunca es merecida, y que solamente es por la gracia del Señor.
¿Cómo recibió su llamado para servir al Señor?
Después de estudiar una carrera, comencé a estudiar también más de la Biblia y alguien me dijo que sería muy conveniente que estudiara en el seminario. La Iglesia Presbiteriana me llamó para que les ayudara en algunas labores del ministerio, y el llamamiento vino después, como resultado de esa experiencia. Comencé a predicar y a ver algunos resultados de la predicación en la gente, y la iglesia fue la que me convenció realmente de que debía dedicarme al ministerio. Así que fue un proceso también largo. Eso habla un poco de que los llamados de Dios no son todos iguales ni son instantáneos. Si pudiera destacar alguna cosa que ha aprendido con su trabajo en este ministerio Lo principal es que Dios usa distintos medios para llegar a las personas. A veces el medio impreso, a veces son los medios audiovisuales y, por supuesto, la labor de la iglesia local. Pero todos ellos son complementarios. Yo creo honestamente que la Palabra de Dios está viva, no está presa, corre y hace lo que Dios quiere que haga, no importa el formato, no importan los medios que se utilicen. Tenemos que tener confianza en que cuando utilizamos los medios bien, Dios va a atraer algún tipo de impacto.
¿Qué impacto ha notado a través de los programas?
Los testimonios nos llegan de diversas maneras. El impacto es la vida cambiada. Nos dan esos testimonios que nos hacen sentirnos muy agradecidos del impacto que tienen estos programas en la vida de ellos. No creemos que sea por la tecnología ni por las habilidades del que predica o el que enseña sino que es la Palabra de Dios que hace su obra en los corazones de las personas.
Algún mensaje para los cristianos que quieran servir a Dios en los medios de comunicación…
Los medios de comunicación son siempre una alternativa buena para dar el mensaje de salvación, que no tiene que ser necesariamente una predicación religiosa, pero a través de los comentarios que hagamos, podemos dejar a la gente pensativa e inspirada en buscar más ayuda o más respuestas a los problemas que tienen. Así que quiero animar a los jóvenes que están estudiando comunicaciones, sin importar si trabajan en un ministerio cristiano o en uno comercial, que recuerden que tienen un mensaje importante que decir y que no saben cómo ni cuándo, alguna persona puede ser alcanzada por lo que ellos digan.
Libros publicados: Las torres gemelas, su destrucción y su mensaje; Cristianismo práctico; La predicación como imagen de la Palabra.
Pasatiempos: lectura, ajedrez, cine y televisión.
Sitio web: www.ministerioreforma.com
¿Cómo y cuándo conoció a Cristo?
Vengo de una familia católica romana. Era una familia bien constituida, pero con 14-15 años, teniendo algunas dudas de la fe, unos amigos me invitaron a una campaña evangelística y eso despertó en mí la curiosidad por la lectura de la Biblia. Por curiosidad también comencé a asistir a la iglesia Presbiteriana, que organizaba la conferencia. Fue un proceso largo, pero la lectura de la Biblia me llevó a una convicción de pecado, a un arrepentimiento y a disfrutar de una salvación, que siempre es don de Dios, que nunca es merecida, y que solamente es por la gracia del Señor.
¿Cómo recibió su llamado para servir al Señor?
Después de estudiar una carrera, comencé a estudiar también más de la Biblia y alguien me dijo que sería muy conveniente que estudiara en el seminario. La Iglesia Presbiteriana me llamó para que les ayudara en algunas labores del ministerio, y el llamamiento vino después, como resultado de esa experiencia. Comencé a predicar y a ver algunos resultados de la predicación en la gente, y la iglesia fue la que me convenció realmente de que debía dedicarme al ministerio. Así que fue un proceso también largo. Eso habla un poco de que los llamados de Dios no son todos iguales ni son instantáneos. Si pudiera destacar alguna cosa que ha aprendido con su trabajo en este ministerio Lo principal es que Dios usa distintos medios para llegar a las personas. A veces el medio impreso, a veces son los medios audiovisuales y, por supuesto, la labor de la iglesia local. Pero todos ellos son complementarios. Yo creo honestamente que la Palabra de Dios está viva, no está presa, corre y hace lo que Dios quiere que haga, no importa el formato, no importan los medios que se utilicen. Tenemos que tener confianza en que cuando utilizamos los medios bien, Dios va a atraer algún tipo de impacto.
¿Qué impacto ha notado a través de los programas?
Los testimonios nos llegan de diversas maneras. El impacto es la vida cambiada. Nos dan esos testimonios que nos hacen sentirnos muy agradecidos del impacto que tienen estos programas en la vida de ellos. No creemos que sea por la tecnología ni por las habilidades del que predica o el que enseña sino que es la Palabra de Dios que hace su obra en los corazones de las personas.
Algún mensaje para los cristianos que quieran servir a Dios en los medios de comunicación…
Los medios de comunicación son siempre una alternativa buena para dar el mensaje de salvación, que no tiene que ser necesariamente una predicación religiosa, pero a través de los comentarios que hagamos, podemos dejar a la gente pensativa e inspirada en buscar más ayuda o más respuestas a los problemas que tienen. Así que quiero animar a los jóvenes que están estudiando comunicaciones, sin importar si trabajan en un ministerio cristiano o en uno comercial, que recuerden que tienen un mensaje importante que decir y que no saben cómo ni cuándo, alguna persona puede ser alcanzada por lo que ellos digan.