¡Estimados amigos y lectores de LA FUENTE! Enero es el mes de las metas, los objetivos y los propósitos. Pero metas, ¿de quién? El mundo ...
¡Estimados amigos y lectores de LA FUENTE!
Enero es el mes de las metas, los objetivos y los propósitos.
Pero metas, ¿de quién?
El mundo nos enseña que podemos crear y visualizar nuestro propio futuro, que debemos tener metas para avanzar y llegar a algún lado con nuestra vida. En parte estoy de acuerdo. Todo lo que se planifica, tiende a obtener resultados. Y las metas son una parte de la planificación.
Pero, ¿qué tal si dejamos de mirar nuestro tan anhelado éxito propio, nuestras metas personales, y tratamos de entender el plan y los tiempos de Dios para nosotros en este 2021?
Días atrás celebrábamos la venida de Cristo a la tierra. Su propósito fue traernos las buenas noticias del evangelio, la salvación del hombre... ¿pero cómo? Mediante la cruz.
Aunque su pasar por este mundo fue una demostración del amor y poder de Dios, el propósito último de Cristo fue morir en la cruz de manera cruel y solitaria.
¿Hemos incluido dentro de nuestros planes personales el sufrimiento y la soledad?
Ahora mira lo que la Biblia dice: “Porque para este propósito habéis sido llamados, pues también Cristo sufrió por vosotros, dejándoos ejemplo para que sigáis sus pisadas...” (1 Pedro 2:21 LBLA).
Estudiando la Biblia, se nos clarifica este tema:
- “A decir verdad, yo te he puesto para mostrar en ti mi poder, y para que mi nombre sea proclamado en toda la tierra” (Éxodo 9:16 RVC).
- “Puedes hacer todos los planes que quieras, pero el propósito del SEÑOR prevalecerá” (Proverbios 19:21 NTV).
¿De qué me sirve realizar mis metas si no guardan ninguna relación con los planes del Señor, cuando, finalmente, son los propósitos de Dios los que prevalecen? ¿Estamos dispuestos a entregar, o inclusive sacrificar, nuestros objetivos personales y buscar los objetivos de Su reino en primer lugar? (cf. Mt. 6:33).
Desde la redacción de la revista LA FUENTE deseamos que cada obrero y líder evangélico pueda buscar y entender los tiempos y los propósitos del Señor, y guiar a Su rebaño a ser parte del gran proyecto de Dios en este nuevo año.
Unidos en Cristo,
Leonard Janz
EDITOR GENERAL