Por Hugo Berthold Friesen, MA, hbfriesen@capellania.org.py Serie: Capellanía Empresarial – parte 1/2. Es ampliamente conocido el ministe...
Por Hugo Berthold Friesen, MA, hbfriesen@capellania.org.py
Serie: Capellanía Empresarial – parte 1/2. Es ampliamente conocido el ministerio de la capellanía en lugares como hospitales, cárceles, y el ejército. Sin embargo, muchos se sorprenden al descubrir
que también en el mundo de la industria y el comercio está presente la capellanía.
Desde que Jesús se relacionaba con pescadores y cobradores de impuestos en Galilea; desde que los Puritanos dieron instrucción religiosa a los técnicos que atendían la maquinaria en las colonias del continente norteamericano, y desde que Juan Wesley visitaba a los mineros de carbón en Inglaterra, a lo largo de la historia ha habido gente que busca hacer conocer el amor de Dios a personas en su lugar de trabajo.
Lo que es hoy la Capellanía Empresarial en Paraguay comenzó con una carga que Dios puso en los corazones de un grupo de empresarios menonitas en Asunción, Paraguay en la década 1980-90. La visión brotó de la inquietud: ¿De qué sirve haber pagado sueldos puntuales que permiten una vida digna a sus colaboradores, si al final de sus días, ellos quedan eternamente apartados de Dios? Los empresarios dialogaron entre sí y con los pastores de sus iglesias locales, y elaboraron un plan de acción y compromiso, el cual también incluía el establecimiento de una “presencia continua misionera entre los empleados de las empresas”. Esto llevó a la contratación de un misionero para visitar a los empleados y presentar breves mensajes de la Biblia en las empresas de estos visionarios.
Al principio los colaboradores tenían mucha reserva acerca de la presencia del capellán. En el primer año un jefe le preguntó al capellán: ¿Por qué sigues predicando, si nadie se convierte? Pero cuando después de unos meses el mismo jefe sufrió un infarto, el capellán le visitó en el hospital y numerosas veces en su casa, aún después de jubilarse por razones médicas. Gracias a estas visitas y las de otro pastor local, con el tiempo él abrazó la fe salvadora en Jesús, y se integró a la iglesia. Un tiempo después llegó a contar su testimonio personal a los excompañeros de trabajo.
La Capellanía Empresarial anima a las personas a conocer más la Biblia, y a Jesucristo como único “mediador entre Dios y los hombres” (1 Tim. 2.5) pero deja a criterio de cada uno elegir a cuál iglesia quiere asistir. Los capellanes se relacionan con pastores de muchas corrientes cristianas, para poder recomendarles a empleados interesados, y servir de “puente” entre éstos y una iglesia local.
Los capellanes tratan de estar presentes en los momentos críticos de la vida de los trabajadores, como por ejemplo el nacimiento de un hijo, el fallecimiento de un familiar, el casamiento, situaciones conflictivas o emergencias. Además, los capellanes organizan charlas, retiros y excursiones para los empleados y sus familias, para darles la oportunidad de divertirse sanamente, y conocer los principios de Dios acerca de la vida matrimonial y familiar.
Varias empresas han establecido su propia biblioteca con libros y DVDs de contenido cristiano, para prestar gratuitamente a los colaboradores. Estas son algunas maneras en que los capellanes empresariales hacen accesible la Palabra de Dios a muchos que quizás nunca han pisado el umbral de una iglesia, ni conocen personalmente a Jesús.
Quizás Dios te está llamando a ver nuevas posibilidades de “promover el Reino de Dios en el mundo de trabajo” en tu comunidad local! Siéntate libre de visitar nuestro sitio de web: www.capellania.org.py o contactarnos por correo electrónico a: eventos@capellania.org.py o al tel. (595) 21- 293-955 en Asunción, Paraguay.
Serie: Capellanía Empresarial – parte 1/2. Es ampliamente conocido el ministerio de la capellanía en lugares como hospitales, cárceles, y el ejército. Sin embargo, muchos se sorprenden al descubrir
que también en el mundo de la industria y el comercio está presente la capellanía.
Desde que Jesús se relacionaba con pescadores y cobradores de impuestos en Galilea; desde que los Puritanos dieron instrucción religiosa a los técnicos que atendían la maquinaria en las colonias del continente norteamericano, y desde que Juan Wesley visitaba a los mineros de carbón en Inglaterra, a lo largo de la historia ha habido gente que busca hacer conocer el amor de Dios a personas en su lugar de trabajo.
Lo que es hoy la Capellanía Empresarial en Paraguay comenzó con una carga que Dios puso en los corazones de un grupo de empresarios menonitas en Asunción, Paraguay en la década 1980-90. La visión brotó de la inquietud: ¿De qué sirve haber pagado sueldos puntuales que permiten una vida digna a sus colaboradores, si al final de sus días, ellos quedan eternamente apartados de Dios? Los empresarios dialogaron entre sí y con los pastores de sus iglesias locales, y elaboraron un plan de acción y compromiso, el cual también incluía el establecimiento de una “presencia continua misionera entre los empleados de las empresas”. Esto llevó a la contratación de un misionero para visitar a los empleados y presentar breves mensajes de la Biblia en las empresas de estos visionarios.
Al principio los colaboradores tenían mucha reserva acerca de la presencia del capellán. En el primer año un jefe le preguntó al capellán: ¿Por qué sigues predicando, si nadie se convierte? Pero cuando después de unos meses el mismo jefe sufrió un infarto, el capellán le visitó en el hospital y numerosas veces en su casa, aún después de jubilarse por razones médicas. Gracias a estas visitas y las de otro pastor local, con el tiempo él abrazó la fe salvadora en Jesús, y se integró a la iglesia. Un tiempo después llegó a contar su testimonio personal a los excompañeros de trabajo.
La Capellanía Empresarial anima a las personas a conocer más la Biblia, y a Jesucristo como único “mediador entre Dios y los hombres” (1 Tim. 2.5) pero deja a criterio de cada uno elegir a cuál iglesia quiere asistir. Los capellanes se relacionan con pastores de muchas corrientes cristianas, para poder recomendarles a empleados interesados, y servir de “puente” entre éstos y una iglesia local.
Los capellanes tratan de estar presentes en los momentos críticos de la vida de los trabajadores, como por ejemplo el nacimiento de un hijo, el fallecimiento de un familiar, el casamiento, situaciones conflictivas o emergencias. Además, los capellanes organizan charlas, retiros y excursiones para los empleados y sus familias, para darles la oportunidad de divertirse sanamente, y conocer los principios de Dios acerca de la vida matrimonial y familiar.
Varias empresas han establecido su propia biblioteca con libros y DVDs de contenido cristiano, para prestar gratuitamente a los colaboradores. Estas son algunas maneras en que los capellanes empresariales hacen accesible la Palabra de Dios a muchos que quizás nunca han pisado el umbral de una iglesia, ni conocen personalmente a Jesús.
Quizás Dios te está llamando a ver nuevas posibilidades de “promover el Reino de Dios en el mundo de trabajo” en tu comunidad local! Siéntate libre de visitar nuestro sitio de web: www.capellania.org.py o contactarnos por correo electrónico a: eventos@capellania.org.py o al tel. (595) 21- 293-955 en Asunción, Paraguay.